Gestión prospectiva del agua en Mendoza: pasado, preesente y futuro

Galileo Vitali

En 1940, Galileo Vitali (quien llegó a ocupar un puesto importante en el Departamento General de Irrigación) termina su obra escrita: “Hidrología Mendocina”. En ella supervisa los sistemas de riego y también realiza investigaciones y estudios técnicos sobre la hidrología de la provincia. Vitali fue quien alertó acerca del peligro de la tala de la flora nativa en el piedemonte que favorecía la formación de aluviones. También realizó un valioso aporte al conocimiento sobre las aguas subterráneas cuando acompaña a Pablo Loos y Alberto de Vita en varios sondeos de las napas subterráneas. 

Su obra fue publicada en 1946 mediante una Ley Provincial que autorizó el pago de la misma, ya que el autor, en su momento, no había podido publicarla por falta de dinero para edición e impresión.     

Figura 189: Galileo Vitali

Fuente: Álbum familiar de Galileo Vitali.

En 1941 se celebra en Mendoza el Primer Congreso Argentino del Agua, en el que disertan importantes especialistas que aportan mejoras en el aprovechamiento y conservación de los recursos hídricos del país.

A partir de la década del ´60 se logra ampliar aún más la superficie regada y ya se complementa el riego con agua subterránea. 

La presa-embalse El Carrizal se construye en 1965 y comienza a funcionar en 1973. El Nihuil I comienza a construirse en 1942 y su inicio de operaciones es en 1957. El Nihuil II se construye en 1967 y comienza a operar en 1968. Por último, el Nihuil III es construido en 1969 y su funcionamiento comienza en 1972.

El dique Agua del Toro se construye en el año 1966, pero no comienza a operar sino hasta el año 1982.

En la década del 80 se construyen y comienzan a funcionar Los Reyunos y El Tigre. 

La central El Nihuil IV comienza a funcionar en 1997, pero se encontraba en construcción desde 1958. 

La presa-embalse Potrerillos y el Complejo Hidroeléctrico Álvarez Condarco, comienzan a funcionar en el año 2003.